Cortar la cebolla chiquita y colocarla en una sartén caliente con un poco de aceite de oliva. Cuando esté transparente, agregar las cucharadas de azúcar y cocinar hasta caramelizar.
Cortar el queso provolone en 24 cubitos.
Hacer cuatro piquitos en las tapas para empanadas, colocar una cucharada de cebollas caramelizadas en cada una y arriba un cubito de provolone. Terminar con un poco de orégano fresco picado.
Llevar al horno precalentado a 180ºC por 15 minutos o hasta dorar la masa.